En Junio de 2012, a María Robles le diagnostican la enfermedad de Alzheimer poco tiempo después de jubilarse.
Acompañada por su hija Isabel, emprende una huida en el tiempo para luchar contra la enfermedad del olvido. Con el anhelo de recordar su pasado, viaja hasta un geriátrico de Vizcaya sumido en la quietud de un frondoso bosque junto a una pequeña bahía, donde trabajó en su juventud.
Su estancia allí le servirá para volver a entrar en contacto con la quebradiza existencia de quienes ven arrastrarse sus días, y también para descubrir los asombrosos poderes mentales de su hija, lastrada por una leve minusvalía psíquica.
A pesar de su denodada lucha, María se precipitará al abismo, derrotada por la tempestad de niebla del Alzheimer. Tras morir, legará al mundo una mujer desvalida a la zozobra, pero que dentro de los muros del geriátrico se convertirá en el ángel del mar de los que inician el viaje a la eternidad.
- Título: Los Ángeles del mar
- Autor: Andrés Alonso Castillo
- Editorial: Corona Borealis
- Colección: Morfeo/Narrativa
- Páginas: 362
- Formato: 15 x 21
- Encuadernación: Rústica
- ISBN: 978-84-15465-69-0
- Código de Barras: 9788415465690
42 respuestas a «Los Ángeles del Mar»
Hola Andrés:
Te escribo estas líneas para decirte que he leído tu libro. Me ha gustado.
Sabes expresar tus sentimientos y vivencias de una forma especial.
Han surgido momentos en la obra que has conseguido que me identifique de una alguna forma con los personajes y entenderlos.
Aquí te incluyo algunas de ellas:
.-Hay momentos difíciles en la vida que las personas debemos afrontar, pero que nos resistimos a hacerlo con la esperanza de que el destino lo devore de nuestra memoria.
(Que bien has sabido plasmar el sentimiento de la persona afectada).
.- El amor transforma los sentidos hasta convertirlos en ciegos insensatos de la realidad.
(Una frase muy acertada a tantas y tantas que nosotros conocemos).
.-La rutina duerme los sentimientos.Sin embargo, te diré que mi trabajo nunca fue una obligación, sino una forma de ganarme la vida dignamente haciendo lo que me gustaba. Siempre me he sentido afortunada.
(Completamente identificada ).
.- Resignarse a la muerte era el antídoto para no sufrir por su llegada. (Sin palabras).
A la espera de tu nuevo libro
Un abrazo
Pilar.
Hola, Pilar.
Quizás en esas reflexiones se esconde el miedo del ser humano a enfrentarse a la cruel realidad que la vida nos depara en ciertos momentos.
Gracias a los enfermos y a sus cuidadores, he aprendido a comprender( aunque sea algo) los rigores de la existencia humana.
Cuando escribí la novela, me reservé la noche y su silencio para sumergirme en las dudas y en las reflexiones de la protagonista. Junto a ella, sufrí el miedo a la muerte, al más allá, y los temores y preocupaciones por quien dejaba en este mundo, su adorada hija Isabel.
Muchas gracias por rescatar esas frases con las que tanto me emocioné evocando a María Robles.
Hola Andrés. He leído tu novela y me ha parecido excepcional. Un libro muy diferente a todo lo que he leído hasta ahora. En muchas ocasiones, a lo largo de la lectura he tenido la sensación de estar leyendo poesía en vez de novela. Una manera de escribir con mucha personalidad, sin duda. Me ha gustado tu forma de tratar un tema tan delicado como el alzheimer. Un tema muy cercano para mi, del que tuve la ocasión hace unos años de aprender mucho a través de mi abuelo y a través de mi madre y mi abuela que fueron unos verdaderos ángeles para él.
Muchas felicidades por tu libro.
Hola, Arrate.
Me interesa mucho conocer las opiniones de lectores que, por los avatares de la vida, les ha tocado vivir la crudeza del alzheimer. Me emociona leer vuestros comentarios porque sabéis de verdad cómo es la enfermedad, y lo duro que es atravesar ese trance para sus allegados. Esta es una novela para vosotros, para quienes entregáis cariño y dedicación a seres tan necesitados de ambos.
Muchas gracias por leerme. Un escritor sin lectores se marchita. Son estos ánimos los que me incitan a seguir escribiendo.
Mi más sincera enhorabuena por tu novela «Los Ángeles del mar». Por acercarte a un tema tan doloroso con tanto cariño. Por la construcción de unos personajes, no sólo los protagonistas principales, sino todos aquellos que no me atrevería a calificar de «secundarios», que permiten adentrarse al lector en la psicología de cada uno de ellos.
En definitiva, una gran novela.
Hola, Miguel Ángel. Gracias a ti por tu brillante intervención el día de la presentación de la novela. Gracias por ahondar en ella como un cirujano con su bisturí para sumergirte en sus entrañas. Gracias también por tu colaboración desinteresada desde que te comenté la inminencia del lanzamiento editorial.
Para mí, fue vital gozar tanto de tu presencia como las de Ernesto Sáenz de Buruaga, Luis Ángel Valcárcel, María Vélez y José Manuel García. Todo fue muy fácil acompañado de vosotros.
Hola Andrés, he leído tu novela y es extraordinaria, y tan descriptiva que parecía en muchos momentos estar viviendo las historias del libro. Me emociona la delicadeza y generosidad con que tratas el tema del alzéhimer. A pesar de conocerlo muy bien hace muchos años nunca te acostrumbras a él. He disfrutado mucho y me ha servido de evasión a mi pesadilla diaria. Gracias.
Hola, Ascen.
Si a ti te ha emocionado la novela, tú has hecho lo mismo conmigo al leerte.
En todo momento, cuando imaginé a mis ángeles, procuré tratarles como se merecen pasando por encima de las penalidades y los rigores de la última fase de la enfermedad.
No he pretendido fotografiar la crudeza del alzheimer, sino la esperanza y el recuerdo de unos seres que en el pasado fueron dueños de sus actos. De ahí, las continuas referencias al pasado de la protagonista cuando le cuenta su vida a Isabel.
Eso es lo que NUNCA debemos olvidar.
Precisamente ,eso es lo que me ha gustado del libro la sensibilidad con que se trata el tema. Al leerlo me he acordado de todas las personas que cuidan durante el día a mi madre y me he sentido arropada, comprendida y esa sensación de soledad se ha evaporado. La crueldad de la enfermedad creo que no es necesario exponerla, ya la vivimos a diario cuando tenemos alguien cercano que la esta padeciendo.
Muchas gracias por esa delicadeza y sensibilidad.
Siempre quise evitar ahondar en esa crueldad que, como bien dices, ya viven los familiares del enfermo. Por ello, concebí un cambio en el narrador, que pasa a ser su propia hija para quedarme con el recuerdo de una vida intensa y con la herencia que la protagonista legó a este mundo.
Tu novela me ha parecido genial, la historia, los personajes, todo…Yo que leo mucho, lo recomiendo como libro de cabecera sobre todo si tienes padres ya mayores. He disfrutado mucho leyéndolo. No dejes de escribir.
Hola, Inés.
Me alegra mucho que te haya gustado.
Recibir tantas críticas y, tan positivas, me estimula para seguir escribiendo y compatibilizarlo con mi dedicación profesional.
Estoy metido de lleno con otra novela totalmente distinta a mis ángeles, que nacieron con la esperanza de dar voz a quienes dedican sus vidas a los demás.
Muchas gracias por tus comentarios.
Bien escrito y estructurado, con un vocabulario muy rico y una lectura verdaderamente amena. Una novela con encanto que no solo me ha gustado sino que recomiendo e indudablemente volveré a leer . Felicidades Andrés. Una obra de diez.
Gracias por tus palabras.
Es una alegría para mí saber que mi novela no solo te haya gustado, sino que la consideres recomendable. Para mí, es un honor recibir estos halagos mientras recuerdo a sus protagonistas velando por el descanso de los moradores del barco de los sueños. Tras ver tanta penuria, quise reflejar la esperanza y dedicación de todos ellos. Es una novela de homenaje.
Hola Andrés,
Lo primero enhorabuena por la novela, he disfrutado desde el principio hasta el final.
Lo segundo cuando la leía, pensaba cuando estudiábamos juntos en nuestro querido colegio de SSCC y me parecía increíble que aquel compañero de clase fuese el escritor de tan bella novela.
Mucha suerte en las siguientes, que las habrá.
Hola, José.
Ya ves las vueltas que da la vida.
Lo que te puedo reconocer es que gracias a esta novela he visto y aprendido muchos aspectos de la vida que hasta ahora no se me habían mostrado.
Escribir me permite dejar volar la imaginación y compartirla con todos.
Gracias por acompañarme a la presentación de la novela.
Gracias por leerme y animarme a seguir adelante.
Hola Andrés; antes de nada, decirte que no soy familia de esa » María Robles», aunque tengo una hermana que se llama igual. Hace unos días que acabe el libro y aun hoy me vienen a la cabeza imágenes de los personajes de tu novela que tan bien describes; y me vienen a la cabeza por su crudeza, unas veces, y por su ternura otras. Has sabido ensamblar los dos mundos a los que pertenecemos, el mundo de la ilusión por vivir y el mundo de la desesperación y el derrotismo que nos invade cuando vemos sin salida el camino de la vida. Es verdad que al final hay una luz de esperanza en tu libro, pero está envuelto en un final con tintes de derrota de la memoria. Gracias por los buenos ratos que me has hecho pasar con este libro. Un fuerte abrazo
Hola, Fernando.
No creas que Robles ha sido un apellido escogido al azar. Muy al contrario.
Robles suena a fuerza, a vigor, a entereza. Estas son algunas de las virtudes que adornan a la protagonista de mi novela para llevar a buen puerto a su hija antes de que la enfermedad del olvido la convirtiera en un ser errante.
Gracias por todo, Fernando.
Gracias por acompañarme el día de la presentación.
Gracias por leer mi novela, pues no hay mayor alegría para un escritor que sentirse leído.
Y gracias también por opinar.
Un abrazo.
Leyendo tu libro me vinieron a la mente escenas que tenía olvidadas.Me acordé de aquellas noches,al calor de la cocina de leña,en las que mi padre nos contaba historias de su dia a dia.Mi padre ejercía la medicina en la Galicia rural en una epoca en la que ser médico era mucho mas que recetar medicamentos: asistía partos de nalgas sin medios en casas aisladas,visitaba ancianos encamados en condiciones lamentables,trataba a jovenes encerrados por su agresividad que recibian comida por una rejilla….
Hoy el alzheimer que padece mi padre nos ha privado de sus historias,pero despues de leer tu libro veo con claridad que mi padre fue un «angel» para todas aquellas personas a las que ayudó y ahora pasa todas sus horas junto a mi madre «su angel»,y esta vision y estos pensamientos me hacen mas feliz.
Gracias por tratar con tanto respeto y cariño este tema y por abrirme los ojos.A veces los angeles estan más cerca de lo que creemos.
Enhorabuena por tu libro,que tu mente siga construyendo historias para que podamos disfrutarlas.
Hola, Juan.
Me dejas sin palabras.
Es para mí un orgullo que la novela haya sido capaz de transmitir la parte positiva de las debilidades humanas. La enfermedad es uno de los males del hombre, pero es también el causante de que los seres queridos ofrezcan toda la ternura y el cariño a los que más lo necesitan.
No dudes que tu padre ha sido y SIGUE SIENDO un ángel. La diferencia es que ahora se deja querer por otros como él porque ya ha cumplido con creces con su cometido por los demás. Ahora os deja a todos que aprendáis a ser un poco ángeles y le entreguéis ese cariño que tanto necesita.
Mientras tanto, él seguirá feliz en su jardín con sus perros y sus árboles frutales compartiéndolos con todos los que tenemos la suerte de conocerle. Le recuerdo este verano feliz mostrándome todos los árboles frutales del jardín, y explicándome las costosas tareas de mantenimiento. Siempre que he estado en su casa me ha hecho sentir como en la mía. Y eso es algo que no se olvida.
Gracias, y cuídale como siempre ha hecho él contigo. A nuestra edad, nos toca devolver todo lo que nos ha sido dado por nuestros padres.
He llegado al final del libro y muy emocionada, abro la ventana y oigo el tranquilizante ruído del río que tantos paseos te ha hecho disfrutar. Ahora discurren por sus aguas todos los personajes que has creado con gran sutileza y cariño, casi puedo ponerles cara a cada uno de ellos. Es un privilegio leer en tus páginas acerca de ese personaje de madera que tan buenos momentos te ha dado y que mora en un lugar seguro en espera de unas manos sabias que le hagan surcar de nuevo este río. Enhorabuena, sigue adelante con tu sueño, hecho realidad, y gracias por hacernos partícipes de tus paseos.
Me alegra saber que te ha gustado lo que con tanto sentimiento escribí.
El camino de la fervenza es un paraje ideal para la abstracción. Allí el pensamiento y los sueños fluyen de forma tan natural como el río que lo circunda.
Gracias por acompañarme durante esos paseos y llevarme hasta la sirena. Al saber de su leyenda, me inspiró el personaje de Iria Silva.
Gracias también por contarme la historia del pazo de Isabel II, donde imaginé a Iria y Suso enamorados bajo la luz de la luna.
Tuve la oportunidad de asistir a la presentación de Los Ángeles del Mar y agradezco lo divulgativa, emotiva y concurrida que llegó a ser la misma. Agradezco, también, que no hayas elegido los fríos salones de un hotel o un ruidoso café-teatro que pueda estar de moda en tu localidad natal. Hoy en día algunas presentaciones son de todo menos presentaciones de novelas.
En mi opinión, ha sido una acertada elección elegir un precioso colegio como el de los Sagrados Corazones de Miranda de Ebro. Gracias y bravo por el resultado final del emplazamiento.
Felicidades por contar con un periodista de la talla de D. Ernesto Sáez de Buruaga , un verdadero lujo que no está al alcance de cualquier escritor, más aún, en el día en que presentas su primera novela. Fue un magnifico maestro de ceremonias, que supo en todo momento dar el protagonismo necesario a tu estupenda novela, resaltando en ella el valor por la elección de un tema tan sobrecogedor como el Alzheimer y haciendo especial mención al universo de sensaciones que el lector puede disfrutar al leer tu libro.
No quiero perder la oportunidad de comentarte que lo mejor que una novela puede ofrecer es que seas capaz, como lector, de llegar a ver lo que lees, de empatizar y vivir la historia que se describe en ella.
Felicidades por «Los Ángeles del Mar» y deseo que jamás se agoten los escritores como tú.
Hola, Alberto.
Si por algo merece la pena escribir es por gestos como el tuyo.
Saber el viaje que te metiste para asistir a la presentación y poder vernos, me llena de satisfacción.
Ahora lo que espero es la novela haya merecido tan largo viaje.
También deseo que el proyecto que tienes en manos vea la luz.
Ánimo con ello y gracias por acompañarme en un día tan especial para mí.
Hay ocasiones en las que el olvido debería ser considerado una bendición y no una enfermedad puesto que por desgracia para mucha gente es el único modo de poder vivir en paz con su pasado y reconciliarse con el presente. Demasiados recuerdos que castigan el presente, demasiadas heridas abiertas hacen que el olvido sea la única medicina para los que han sufrido más de lo que ellos mismos hubiesen podido imaginar.
Gracias Andrés por tu libro.
No nos hagas esperar mucho para el siguiente
Te agradezco mucho tu comentario.
Sinceramente, comunicas muy bien.
Espero que te haya gustado la novela.
En cuanto a proyectos para el futuro, iremos viendo paso a paso.
Sí que te puedo decir que los tengo , aunque necesito tiempo para reflexionar un poco. Todo está pasando muy deprisa con esta novela.
Andrés.
Esta enfermedad es una carga para todo el núcleo familiar y en ocasiones llega a destrozarlo, tanto a nivel económico como a nivel asistencial. Es de gran ayuda que la gente conozca más sobre este tema, para lograr que la sociedad y el gobierno se muestren más comprometidos con las ayudas.
Hola, Andrés.
La verdad es que fue una reunión entrañable en «nuestro» Colegio de tan gratos recuerdos. Además, ya perteneces al elenco de los grandes creadores relacionados con las Letras (lírica, novela, teatro), el periodismo y la investigación quienes se han ilustrado en sus aulas. Desde aquí deseo recordar algunos de sus nombres: Juan Larrea y Celayeta, introductor del Surrealismo en España; Francisco Cantera Burgos, experto, sobre todo, en estudios sefarditas; Rafael Sánchez Mazas, el que aparece en la novela «Soldados de Salamina» (Javier Cercas), padre de Rafael Sánchez Ferlosio («El Jarama») y novelista de la posguerra; David Barbero, escritor y presentador en TV; Pablo Zapata, novelista; Adelino Hernández, excelente narrador de cuentos; Ernesto Saénz de Buruaga, periodista relevante, cuyos artículos no dejan indiferente a nadie; Rafael Ruiz Peña, periodista especializado en asuntos ecológicos y brillante narrador (Tiene editado varios libros de cuentos), creador del Asombrario, revista online que se puede leer en eldiario.com.
Seguramente que me he dejado a varios de los que no tengo referencias. Pido mis disculpas.
Como puedes apreciar, es un Centro en que, además de valores, también se trasmite el «virus» de lo literario y creativo. ¡Que siga la racha! Enhorabuena por tu entrañable «Ángeles del mar» y ¡Felicidades!
¿Para cuándo la segunda?
Un abrazo
Hola, José Manuel.
Como dije ayer en la presentación de la novela, cuando se logra cumplir un sueño, hay que echar la vista atrás y ver quienes te han ido forjando en el pasado.
Debido al escaso tiempo del que disponía para mi intervención, solo mencioné a mi mujer y a mis padres. Sin embargo, te diré que en mi memoria permanecen grabados todos aquellos que me formaron tanto a nivel docente como humano. Tú eres uno de ellos. Contigo aprendí el valor de la palabra hace muchos años, incluso durante estos días previos preparando la presentación has sabido contagiarme de tu entusiasmo con la novela. Muchas gracias por tu tiempo y tu dedicación.
En cuanto al futuro, te puedo decir que ahora mismo estoy con Sophie ( ya sabes quién es).
Mi intuición me dice que esa tal Sophie me va a entusiasmar. Ardo en deseos honestos de conocerla. Un abrazo. JM
Buenos días.
Desde aquí quiero agradecer a cuantos me acompañasteis ayer en el acto de presentación de mi novela. Me llevo para mi recuerdo todas las muestras de afecto y alegría que vi reflejadas en vuestras palabras, en vuestros ánimos y en vuestros abrazos.
Como dije ayer, lo más importante para mí fue contar con vuestra presencia y apoyo. Fue emocionante poder reunirnos para algo entrañable y dar voz a las realidades que nos rodean y no sabemos comprender porque las vemos ajenas a nosotros.
Gracias a todos.
Hola Andrés.
Gracias por haberme hecho participe de un acto tan emotivo como el del pasado sábado. Mientras te escuchaba se agolpaban gratos recuerdos de nuestro paso por el Colegio. Me pareció excepcional el comentario: «¿Por qué queremos? Queremos porque tenemos recuerdos.»
Enhorabuena y ánimo con la segunda.
Un abrazo.
Hola, Javi ( o maño como te conocemos los irreductibles del 65).
Gracias por acompañarme el sábado pasado. Desde que la editorial me propuso publicar la novela, y me decidí por organizar un acto de presentación, he vivido unos días muy emotivos.
Escribir la novela también lo fue ya que, como dije en el acto, el deseo de escribirla nació para dar voz a todo lo que vi durante años. Para mí ha sido un orgullo dar rienda suelta a estos sentimientos y a la imaginación.
Espero que te guste, y si te parece, puedes comentar tu opinión en la página.
Gracias.
Increíble que un escritor se adentre en un mundo tan complicado como el de esta enfermedad y refleje lo bueno y lo malo, con humor, poesía y amor. Un acierto. Libro recomendable.
Si algún día caigo enfermo, me gustaría que alguien me tratara como María e Isabel tratan a los ancianos, con dignidad , respeto y sobre todo con cariño. Gracias a también a todas las “Claudias” que nos rodean. Sin ellas, el mundo sería un poquito más oscuro.
En verdad que hay verdaderos ángeles entre los profesionales geriátricos y sanitarios, ayudando a cuidar a nuestros enfermos y ancianos. Esta novela los plasma. A todos ellos y a su autor mis más sinceras felicitaciones
Gracias, Sandra.
Tú también te lo has devorado en apenas una semana.
Creo que es necesario recordar la labor de muchos profesionales que cuidan de los nuestros y nos hacen la vida más fácil.
No vemos el sábado en la presentación
Ya era hora de una novela que hablara de la crudeza del Alzheimer, que afecta a 1 millón de personas, sólo en nuestro país. Hables con quien hables, siempre encuentras que tiene un familiar o un amigo afectado por esta enfermedad. Recomiendo su lectura.
Hola,
me ha gustado mucho tu libro. Tiene esa mezcla de realismo y de metáfora, en ocasiones difícil de encontrar. Me han enganchado las historias, subyacentes, sobre todo la de Iria, que me ha cautivado. Esta novela ayuda a comprender mejor el desgaste que supone la enfermedad del olvido.
Ya veo que te has leído la novela en menos de una semana.
Celebro que te haya gustado.
No vemos el sábado en la presentación.
He leído tu novela y me parece magnífica. Creo que eres un excelente narrador lleno de poesía y sentimiento. En mi opinión los personajes están perfectamente definidos; en este sentido y a pesar de mostrar la dureza del Alzheimer, introduces a Claudia que nos invita a la sonrisa. La historia ha mantenido mi interés hasta el final. La elección del título ha sido muy acertada; nuestro ritmo de vida es tan trepidante que a veces no percibimos a las personas que día a día están ahí para ayudarnos. Esos son los verdaderos ángeles. Recomiendo su lectura. EXCELENTE.
Hola, Puri.
Agradezco de corazón tu comentario. Es el primero que se inserta en la web.
Me alegra saber que te ha gustado la novela.
Sobre Claudia tengo que confesarte que en un primer momento la concebí como un personaje secundario, pero con el paso del tiempo me fui prendando de ella hasta convertirse, en mi opinión, en uno de los personajes principales. Además, contribuye a cambiar el ritmo de la novela. Es como la sal o el azúcar.
Gracias.